Otra vez.

Hay cosas que siempre se han querido armar....




ah!

y ha sido un gusto...

jueves, 8 de septiembre de 2011

EspinoSa

Te conocí y siempre supe que eras distinto.
Recuerdo pocas veces haber recibido un abrazo, de esos bien apretados tuyos, pero siempre me hiciste saber, eso si que siempre a tu manera, que me querías, por lo menos así lo sentí. Desde hace algún tiempo me he dado cuenta que tú y yo nos parecemos mucho, mi papá así me lo comentó una vez "te pareces mas al Cacho de lo que pensaba" y tu lo sabías mejor que yo, de eso no hay duda. Aunque no lo creas, siempre admire esa forma especial.
Siempre fui para ti la cara de mono y tenías esa mirada fría, pero tenías esos pequeños gestos que jamás olvidaré (me podía sentar en tu mecedora, junto a ti y tus trenes) y esa forma de escapar de todos de una manera magistral, era única, te escondías caminando, en tu don mágico de hacer los mejores muebles o en tus historias de trenes.
Es inevitable toparme contigo cuando veo un tren, en los trenes estás tú.
En estos meses me he topado mucho contigo y me hubiera gustado tener mis 24 hace unos años atrás, tú con la mente más clara y yo habría encontrado las palabras para conversar contigo. Tu silencio siempre te hizo interesante, me sentía cómoda contigo en ese estado, escuchar tus historias eran esos buenos momentos, yo escuchaba y eras tú. En ocasiones rompías con esas sorpresas, hablabas fuerte y me gustaba.
Mi viejo, cumplí con la promesa que te hice, no fui veterinaria, no sé si me asustaste aquel día, tu rudeza era única, pero nunca quise.
Simplemente creo que estarías feliz con todos, con los tuyos, desordenados pero con tu recuerdo y cuidando que el apellido se mantenga con "s" como tú querías.

Trenes, silencios y tú, mi Tata Cacho.

2 comentarios:

Fernanda Espinoza G. dijo...

Que bello! Acabo de leerlo y estaba chillando ppr otra cosa... Ahora lo leí y chillé más, es hermoso y además me doy cuenta que hay cosas mucho más importantes que por lo que ya estaba chillando. Te quiero amigui.

Me. dijo...

Acabo de ver el comentario, y también termine chillando, te quiero mucho loquilla. Siempre hay cosas por las que continuar en este mundo, pero feliz.